En el blog «¿Por qué Argentina?»
… una descendiente cuenta la historia de una joven que viajó de Alemania a Argentina para casarse. Se llamaba Nora Liebe-Oldekop y viajó a Buenos Aires en barco. Una vez allí, se casó con Carlos Kunzi en el Hotel de Inmigrantes.
Sólo así pudo permanecer en el país. Su marido Carlos también tenía 18 años en 1924 y había emigrado con sus padres. Habían comprado tierras allí, lejos del puerto de Eldorado.
Sin embargo, la nieta Hildegard Kunzi escribe que fue un matrimonio concertado y que la joven, su abuela, no le convenía a su marido: Había sido ambiciosa artísticamente y se había perdido «una buena forma de vida». De hecho, el comienzo en el norte de Argentina fue sencillo. Hablo de ello en mi libro «Camino a la nueva patria».
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